Si eres nativo del signo Aries estamos seguros de varias cosas: Eres un líder natural, posees un atractivo difícil de ignorar y una seguridad personal que siempre te llevará muy lejos en la vida porque Aries es una persona que jamás se detiene sin antes haber logrado exactamente aquello que pretendía.
Pero no todos son rosas y todas las personas, incluso tú, Aries, tienes tus aspectos oscuros, tus defectos que aunque te empeñes en ocultar son también parte de tu esencia y tu personalidad. En el día de hoy vamos a dedicarnos a ellos: A ese costado poco amable y destacado del carácter de Aries que si deseas conocer realmente al primer signo zodiacal tienes que conocer también, aunque Aries preferiría que no lo hicieras.
El lado más oscuro del signo Aries
Si conoces a un nativo de este signo es muy probable que tenga la capacidad de eclipsarte con su encanto al punto de llegar a pensar que no tiene fallas. Y es que Aries se empeña bastante en dar esa imagen de perfección que tanto le gusta que los demás perciban de él. Aries infunde respeto cuando habla, cuando se mueve, es imponente y sabe se atractivo en toda situación. Sin embargo y a poco que comiences a vincularte con él empezarás a notar ciertos defectos muy típicos de estos nativos.
Seguramente en la mayoría de artículos que encuentres sobre este signo vas a ver repetidas una y otra vez las grandes virtudes de este signo y sus cualidades más destacadas pero aquí queremos brindarte un panorama diferente que es tan real y cierto como los atractivos Aries.
Saber de signos implica conocerlos en sus mejores y peores aspectos y hoy vas a conocer más de Aries descubriendo sus rasgos menos destacables. He aquí los peores defectos de este signo:
Ego en grandes dosis: Aries suele vivir en la convicción de que siempre tiene la razón, de que todo lo que él hace está perfectamente hecho y de que los equivocados siempre son los otros. Dueño de una dificultad asombrosa para aceptar sus propios errores un nativo de este signo es ante todo una persona con un fuerte amor propio y una capacidad de auto crítica mínima para no decir nula.
Mal genio: Aries puede tener ciertos días de mucha simpatía pero también tiene ciertas jornadas en las que se torna completamente intratable, sobre todo cuando las cosas no se hacen como él quiere y en virtud de sus indicaciones. Para este signo el hecho de que lo contradigan es una verdadera afrenta y pretender hacerle entrar en razón es siempre una causa perdida. Si no haces lo que Aries dice o perjudicas sus intereses, puedes ganarte un enemigo realmente temible que no descansará hasta ganar la batalla.
Ambición excesiva: Aries siempre querrá ser el mejor, el que más tiene, el que más lejos llega y en ese afán muchas veces no disfruta de lo obtenido pensando en lo que le falta conseguir. Es inconformista y en muchas ocasiones sus ambiciones lo lleva a tener actitudes y a tratar a los demás de formas reprochables que generan malos sentimientos hacia su persona.