Existen personas en este mundo con una sabiduría que va más allá del mundo al que estamos acostumbrados, y ellos son: Los Chamanes. Los chamanes y su energía son los hombres que se encargan de transportar la realidad ordinaria a la realidad no ordinaria, y viceversa.
La realidad ordinaria es la realidad que percibimos habitualmente con nuestros 5 sentidos, y la realidad no ordinaria es tan real como la que vemos con nuestros ojos, percibiendo energías, seres que nos acompañan en su espíritu, etc… ¿Te has imaginado que con solo ver a una flor, no sólo percibes un tallo con sus hojas y sus pétalos, sino que puedas ver a todo un espíritu que habita en su interior? De eso son capaces los Chamanes.
Todo tiene un espíritu y las fuerzas internas y externas se relacionan entre sí. Todos estamos conectados como en una red maestra y las energías son las vías de comunicación. Para el Chaman, todo lo que existe tiene vida, toda materia en existencia tiene un alma o una vida.
¿El Chamán y su misión?
Su principal misión es ayudar a todos los seres existentes en materia. El Chamán puede navegar según su voluntad desde la realidad ordinaria hasta la realidad no ordinaria.
El Chamán puede percibir por medio de las energías que se mueven a nuestro alrededor, si existe algo negativo a nuestro entorno, y nos ayuda a expulsar lo malo para regresarnos lo positivo con fuerza y vitalidad. Un médico del alma se convierte un Chamán.
Si tú te encuentras en el camino de la iluminación y estás dispuesto a cambiar, el Chamán siempre busca y está abierto a compartir su conocimiento con sus discípulos. Su sabiduría la traspasan los ancianos chamanes hacia los jóvenes principiantes. Para los chamanes jóvenes poco valor tienes las posesiones materiales, siempre su trabajo es práctico y ciertamente difícil, una vez conoce la verdad del mundo que nos rodea. Para un Chamán recibe más energía bella en una jardín lleno de los espíritus de plantas, flores, agua y viento, que un castillo lleno de riquezas. Pues para él, la verdadera belleza se encuentra en la realidad no ordinaria, y es ahí donde podemos cambiar nuestras vidas físicas para mejorarlas e incluso sanarlas.
Todo ser en materia tiene un espíritu de poder que nos acompaña y nos da fuerza y vitalidad, y según los chamanes; tiene forma de animal, denominado “animal de poder”. Si vemos una persona que tiene suerte en la vida, alegría, dulzura y luz propia, sabemos que su animal de poder está presente y le cuida y acompaña. Por eso, a ese espíritu hay que cuidarle para que no nos abandone. Sin embargo, alguien descorazonado, depresivo, triste, normalmente sabe que su animal de poder le ha abandonado y el Chamán puede ayudar a recuperarlo. Recobrando de esa manera la alegría y las ganas de vivir y, también será más inmune a enfermad o depresiones. Recupera la fuerza y vitalidad para vivir.
En realidad, todos los expertos en energías poseen sus propias tácticas para internarse en lo más profundo e intenso mundo de las energías y los espíritus, su objetivo y causa natural es poder cambiar las cosas en este mundo difícil en el que vivimos, y en el que cada día tenemos que librar con energías positivas y negativas. Pero si sabemos cómo actuar y manejar nuestras energías, entonces podemos conseguir una fuerza maravillosa con enorme potencial. No existe demasiada diferencia entre las teorías de los Chamanes con la de otras Comunidades tales como los Lamas Budistas, e incluso las ramas ocultistas. Todo se basa en poder manejar nuestras energías positivas y negativas, para poder encontrar el mejor camino para vivir con fuerza y vitalidad positiva ésta vida llena de augurios que muchas veces no entendemos y son tan comunes.
