En el Conejo vemos a un individuo popular pero a la vez tímido. Son compasivos y protectores de familiares y amigos, necesitan una base familiar sólida para prosperar y sentirse bien encaminados. Sin el apoyo suficiente, tienden a desmoronarse en tiempos de conflicto.
Trastornos emocionales pueden causar que se enfermen físicamente. Detestan las discusiones y conflictos. Pueden llegar a ser pesimistas y caer en la depresión.
Estos nativos tienden a moverse a través de la vida a su propio ritmo, sin importar lo que piensen los demás. Son muy sensibles y atentos como también diplomáticos naturales. Disfrutan de una vida tranquila y actividades artísticas.
Ellos tienden a salirse con la suya a través de la bondad, son amables y resulta difícil verlos metidos en algún problema serio. Aunque muchas veces los conejos puedan parecer distantes, esto no es más que un mecanismo que les sirve para protegerse de cualquier daño. Pueden ser bastante temperamental a veces. Son especialmente discretos.
Los Conejos tienden a reprimir sus sentimientos, el ejercicio y otras formas de reducir el estrés los beneficia mucho.
Pueden tener opiniones poco realistas sobre cómo debe ser una relación, y cuando esta termina se sentirán devastados, tomándoles un tiempo prolongado recuperarse de las desilusiones. Románticos incurables, necesitan una pareja que no tome ventaja de ellos y cuando encuentran a la persona adecuada la relación es muy fuerte. Les encanta la compañía y tener a alguien especial. Se sienten vulnerables cuando los demás saben demasiado acerca de su vida privada.
Los Conejos son buenos para comunicarse, se destacan escritores, artistas, terapeutas, sanadores y maestros. Sus habilidades diplomáticas son útiles en cualquier tipo de profesión.
Son compatibles con el Chancho y el Perro y no lo son tanto con la Rata y el Gallo.