Los nativos del signo de Acuario, se caracterizan por tener dentro de sí mismos una gentileza que les caracteriza por sobre todas las demás cualidades y virtudes que poseen. Hablamos de personas que buscan el bien de los demás de manera sumamente desinteresada, que se preocupan por los otros sin esperar nada a cambio. Esta gentileza se encuentra dentro de cada acuariano, aun cuando a veces no se pueda ver a distancia.
Lo verdaderamente cierto, es que cuando puedes establecer una conexión con alguien que tiene este signo en su espíritu y recibe todas las energías de Acuario, puedes reconocer fácilmente que su bondad y su consideración por las demás personas se encuentra muy arraigado a sí mismo. No hay motivos alternos ni demandas por una recompensa; el crear un ambiente de amistad y establecer fuertes relaciones amistosas es suficiente para que la persona sienta que su trabajo ha sido valorado y apreciado.
Esfuerzos que hacen las personas y consideraciones sin dejar de lado su propia humanidad es un estado difícil de alcanzar. Un tipo de paciencia y cariño hacia las demás personas que se puede asemejar a un padre con sus hijos. De igual forma, el nativo de Acuario ve siempre la manera exacta de ayudar a los demás; tratan de estar presentes en los momentos difíciles y cuando los necesitas; te escuchan, te dan consejos, te tienen paciencia y sobre todo te comprenden; aceptan tu naturaleza y tratan de dar siempre lo mejor de sí mismos para contigo. Así es como los acuarianos mismos, son creadores innatos de momentos inolvidables.
Al entrar en este tipo de energía, contar con esta mentalidad, te permite vivir en un mundo donde se aprecian las experiencias vividas y los momentos de alegría, se busca cuidar a las personas y siempre intentan mejorar de cualquier forma posible. Dejan así de lado deseos vanos y negativos, como las compras materiales, el deseo de resaltar o ser vanidoso, traicionar a las personas o buscar cualquier otro placer egoísta que pueda dañar o despreciar a las demás personas. Un estado casi de tranquilidad y calma pura que les permite encontrar una situación de comodidad en cualquier rubro.
Deshaciéndonos de las energías negativas podemos ver cómo es que estas personas que viven con la energía de Acuario dentro de sí, se encuentran siempre contentos y felices; hallan amigos por todas partes e imparten una energía positiva sublime que a las personas les gusta recibir y rodearse de ellas. No les interesa denigrar a los demás o buscar defectos en las personas; sino que intentan encontrar oportunidades para ser mejor. Las enseñanzas de la vida no les dejan marcas de amargura o resentimiento, sino una oportunidad para mejorar y ser mejores personas; encontrar dentro de sí mismos esa energía positiva para dar a los demás. Una sonrisa de estas personas es muy sincera todo el tiempo. Todos deberíamos de intentar ser como los nativos de este signo; encontrar dentro de nosotros la capacidad para que, con la energía que podemos recibir de la constelación de Acuario, nosotros también podamos mejorar junto con las personas que nos rodean y a quienes queremos.