Como sabemos, los videntes son personas que tienen una capacidad de percibir más allá de lo aparente. Todas las personas podemos imaginarnos situaciones de nuestra vida en que nos sería de muchísima utilidad contar con el don de la videncia, o acceder a él de alguna manera. Pero lo cierto es que, más allá de situaciones cotidianas e individuales, hay cuestiones colectivas y de mucha gravedad que ameritan la participación de estas personas.
Estamos hablando, principalmente, de casos judiciales en los que los videntes que ayudan pueden llegar a establecer una diferencia en una investigación, poniendo en práctica sus capacidades para percibir o recibir imágenes.
Los videntes en el deber civil
Puede sonar difícil de creer, pero sucede que las agencias de investigación más prestigiosas, como la CIA o el FBI han desarrollado programas para captar, entrenar y contratar a videntes que puedan desarrollar sus capacidades al servicio de la justicia y de la investigación. Muchas veces, sus aportes son verdaderamente valiosos, pues dotan a la investigación de una dirección o de una intuición que son de suma importancia.
Algunos de los casos que se han vuelto más populares son aquellos en que ciertas personas con capacidades para la videncia han ayudado a las organizaciones de investigación y de defensa civil a encontrar a personas desaparecidas. Muchos videntes tienen la capacidad de percibir energías, por ejemplo, mediante el contacto con familiares, con imágenes o con objetos pertenecientes a la persona en ausencia.